Un «fiesta de pijamas» muy productiva
A la izquierda «fiesta de pijamas» de Irene Montero y «sus amigas» en EEUU y a la derecha visita oficial seria y rigurosa de Díaz Ayuso. Bromas aparte, la cosa no tiene gracia. La Ministra de Igualdad se ha reunido en EEUU con la Casa Blanca, la ONU, con el Estado de Nueva York, con la OEA y con colectivos feministas y en defensa de los derechos humanos. Irene Montero no fue a hacer turismo. Fue a fortalecer las alianzas feministas en un momento donde el Tribunal Supremo de EEUU ha derogado un derecho fundamental de las mujeres, el derecho al aborto. Y el efecto contagio de EEUU sobre el resto del mundo es evidente. En EEUU no sólo le dieron la bienvenida, también pusieron al Ministerio que preside en la vanguardia mundial de la conquista de derechos para las mujeres. Y eso es lo que a la derecha cavernícola española le duele. Parece que se preocupan de lo nonatos, pero una vez nacidos les da igual si tienen condiciones de vida dignas. Al igual que prefieren que miles de mujeres aborten clandestinamente en condiciones inhumanas poniendo en serio riesgo su vida. Su preocupación por la vida es pura hipocresía.
